Limpieza Hepática

 

Según la Doctora Hulda Clark el hacer una limpieza del hígado y de los conductos biliares es una de las maneras más efectivas de revitalizar un metabolismo y de eliminar grasa del cuerpo debido a la mejoría substancial que esto causa en un sistema digestivo.

Muchas personas tienen los conductos biliares tapados con piedras compuestas de colesterol y bilis endurecida. La bilis es esencial para el metabolismo y la digestión correcta de las grasas y proteínas que consumimos.

Cuando los conductos biliares se tapan con piedras, el metabolismo y la digestión se vuelven deficientes.

 

Los ingredientes que necesitarás son los siguientes:

  • 4 Cucharadas de Sulfato de Magnesio (Sal de Higuera)
  • ½ Taza de aceite de oliva virgen
  • Un pomelo fresco grande o dos pequeños – lo suficiente para extraer ¾ de taza de zumo
  • Pajita grande para ayudar a beber la mezcla
  • Dos jarras con tapa

 

Escoge un día como sábado para hacer la limpieza ya que podrás descansar al próximo día.

Desde el día antes de la limpieza no tomes vitaminas, medicinas ni ninguna cosa que no sean alimentos regulares.

El día de la limpieza toma un desayuno sin ninguna grasa (frutas, cereal cocinado, zumo de frutas) y un almuerzo de patata horneada u otro vegetal con sal solamente. Esto permite que el conducto biliar se llene de bilis y desarrolle una presión para empujar las piedras hacia afuera.

 

Puedes tomar agua pura y simple (sin sabor, ni carbonatada) durante el proceso.

 

Este día, después de las 2:00 p.m. No comas ni tomes nada. Si rompes esta regla te puedes sentir muy mal al hacer la limpieza del hígado.

 

Prepara tu sal de higuera, mezclando 4 cucharadas en 3 tazas de agua y echa esta mezcla en una jarra. Esta mezcla es suficiente para 4 porciones de ¾ de taza cada una. Pon la jarra en el refrigerador para que se enfríe.

 

A las 6:00 p.m. Bebe una porción (¾ de taza) de la mezcla de sal de higuera. Bebe agua después de ingerir la sal de higuera para quitarte el sabor de la boca.

 

A las 8:00 p.m. Bebe otra porción (¾ de taza) de la mezcla de sal de higuera.  No has comido desde las 2:00 p.m. pero no sentirás hambre. Prepara tu cama. En este proceso el factor tiempo es de suma importancia, no te adelantes o atrases por más de 10 minutos mientras lo haces.

 

A las 9:45 p.m. Vierte ½ taza de aceite de oliva virgen en la jarra. Exprime el pomelo, usando la mano en una taza de medir. Remueve del jugo la pulpa con un tenedor. Debes tener ¾ de taza de jugo de pomelo. Añade ahora el zomo de pomelo al aceite de oliva. Cierra la jarra y mézclalos bien hasta que se unan bien el jugo y el aceite (solo con el jugo fresco de pomelo se logra esto).

 

A las 10:00 p.m. Bebe la mezcla que has preparado de aceite de oliva y zumo de pomelo. Tómetelo estando parada(o) de pie, y no tardes más de 5 minutos en ingerirlo completamente. Acuéstate inmediatamente. Si no te acuestas inmediatamente pueden fallar en salir las piedras biliares. Mientras más rápido te acuestes más piedras lograrás sacar. Prepara tu cama con tiempo para que puedas acostarse sin tenerse que levantarte para ir al baño ni ninguna otra situación. Tan pronto se hayas tomado esta mezcla acuéstate boca arriba con la cabeza en la almohada. Trata de pensar en lo que está pasando en el hígado. Trata de mantenerte perfectamente inmóvil por lo menos por 20 minutos. Quizás puedas sentir el rodar de las piedras biliares como si fueran canicas bajando por su conducto biliar. No hay dolor alguno porque los conductos biliares han sido bien abiertos por la sal de higuera. Ponte a dormir, puedes evitar el sacar más piedras si no lo haces.

 

Al próximo día. Al despertarte toma tu tercera dosis de sal de higuera (¾ taza), nunca antes de las 6:00 a.m. Si tienes indigestión o náuseas espera hasta que se te vayan antes de tomar la sal de higuera. Puedes volver a la cama.

 

2 horas después. Toma la cuarta y última dosis de sal de higuera (¾ taza). Puedes volver a la cama.

 

Después de 2 horas más. Puedes comer. Empieza con zumos de frutas y frutas. Durante este día trata de comer comidas fáciles de digerir. Para la noche te debes sentir recuperada(o).

 

¿Cuán bien te fue? Espera tener una diarrea en la mañana. Usa una linterna para buscar las piedras que salieron en su inodoro. Busca las de color verde (color de la bilis) como prueba de que realmente salieron las piedras biliares. Las piedras biliares flotan porque están hechas de colesterol. Puedes repetir esta limpieza intestinal a las 2 semanas y sacar aún más piedras de sus conductos biliares. ¡Hay personas que han reportado miles de piedras flotando en su inodoro!

 

Según la Doctora Clark esta limpieza del hígado es totalmente segura. Se la han hecho personas de 80 años o más de edad sin sufrir complicación alguna.

Las personas que hacen esta limpieza pueden sentirse un poco mal por 2 o 3 días después de la limpieza, sobre todo cuando no hicieron la limpieza de hongos (candida albicans) antes de hacer la limpieza del hígado.

Esto es un malestar temporal en lo que el cuerpo limpia los tóxicos que se desalojaron durante la limpieza.

Este proceso logra sacar las piedras sin cirugía.

Nota: Esta información ha sido traducida del libro The Cure for All Diseases de la doctora Hulda Clark.